1º Capitulo: “Locura en el aeropuerto, mí llegada a Inglaterra.”

Me desperté en mitad de la noche, mire el reloj eran las 03:48 de la madrugada, estaba incomoda, aunque vaya en primera clase, los asientos de los aviones son terribles. Mi garganta pedía agua a gritos, así que me levanté, dando un pequeño codazo a la chica rubia de al lado, pero solo echo un pequeño ronquido y siguió durmiendo. Busque en dos pasillos diferentes a alguna azafata, pero no encontré a ninguna.

-Quien diría, que fuera tan difícil encontrar una persona en un avión- resople resignándome a conseguir un vaso con agua.

-¿Se encuentra bien, señorita?- Me dijo una de las azafatas de abordo, mirándome como a un bicho raro - ¿podría volver a su asiento, señorita?

-Si, claro pe- me corta la azafata.

-por favor, señorita, siéntese- tenia cara de pocos amigos, aunque lo intentaba disimular, yo me fui a sentarme, pero me di cuenta de que estaba en clase de turista, no sabia como había terminado allí, pero que se le va a hacer, así que me dirigí asía el pasillo de primera clase- ¿Que esta asiendo, señorita?, esa parte es para los de primera clase.

-Ya, por eso voy a ir hay -la azafata me miró, como si me tratara de un perro verde que la estuviera hablando.

-Señorita- me miró, seria.

-¿que?- entonces me di cuenta de que la azafata me estaba juzgando por mi vestimenta y seguro que hasta se preguntaba, que como me había pagado el pasaje. Pero sabéis que, mi madre ya me dijo que la gente te juzga por su primera impresión.

-Usted es de clase turista, eso es para los de primera clase – me dijo con una cara muy seria, pero si intentaba ponerme en clase de turista mientras page uno de primea clase, lo llevaba claro. Me voy a divertir un rato con esta azafata ( :D )

-No señorita, yo voy en primera clase– la desafié.

-Mire señorita… - me miro con cara de pocos amigos.

-Mire señorita, ¿Qué?- esto me empieza a divertir.

-Aquí no, nos gusta los mentiroso– Estaba perdiendo los nervios, y eso me gustaba.

-Si entonces, que hace usted aquí- Le dije maliciosamente.

-Si quiero la hecho del avión- Me dijo sintiéndose ya ganadora.

-Me esta amenazando- eleve una ceja.

-No la estoy avisando- vi en su cara una leve sonrisa.

-bueno pues, yo también la aviso, mi madre y el supervisor de las azafatas son muy amigos y pondré una queja de usted cuando pongamos el pie en Inglaterra, a por cierto aquí esta el certificado de que yo soy de primera clase- golpe maestro y final, le quito de las manos segundos después el papel y la dejo boquiabierta, segura que esta pensando como pedirme perdón y la forma de que no me queje al supervisor, me voy triunfante a mi asiento esta vez no me dice ni “mu” y yo añado antes de irme “tráeme un vaso de agua, a mi asiento, hazme el favor” y añado una sonrisa triunfadora.

Me siento en mi asiento, ya no siento sed, pero pedí el vaso de agua por molestar a la azafata, ya me siento tan incomoda como antes, ahora tenga hasta sueño así que me voy a dormir, antes viene la azafata a traerme mi vaso de agua, me sonríe falsamente y me pide perdón por lo de antes yo prefiero no contestar, bebo un poco y le entrego el vaso y ella se retira, ya es hora de acostarse son ya las 4 de la madrugada y dentro de una horas estaré en Inglaterra.

Cuando me despierto miro el móvil son las 3 de la tarde, aquí en Inglaterra, cambie el horario, estamos aterrizando, hay que pereza me da levantarme pero me espera un largo día por delante.

Estoy recogiendo mi maleta, bueno la única que los mayordomos de mi madre me dejan coger, a mi madre no le hace ni pisca  de gracia que su niña coja peso. Mi madre vino unos días antes para arreglar unos asuntos y para ver si todos los papeles de mi inscripción estaban en orden.

Estaba caminando por el pasillo del aeropuerto, con 5 mayordomos a cada lado y uno de ellos me aviso ya antes de que tenia que cambiarme de vestimenta, ya que estábamos en la tierra natal de mi madre y aquí la prensa rosa le encanta sacar criticas a la realeza y cuando saliera más adelante toda la prensa me estaría esperando. Odiaba hacer esto, pero ya estaba acostumbrada, ya que había venido más veces aquí, uno de los baños del aeropuerto estaría reservado para mi, en el baño estaría 1 estilista y 2 maquilladoras y una peluquera y el baño estaría 2 días antes ya equipado o cuando mi madre me convencía para ir en el jet privado lo hacíamos hay. Yo entiendo a mi madre, sé que ella no quiere, que ellos me vean con esta indumentaria, ella no se avergüenza de mi, solo que no quiere que yo sea el punto de mira de la prensa Rosa todo el rato criticándome, ella ya paso por eso cuando se separo de mi padre y no le gusto no quiere lo mismo para mi. Así que siempre hacemos esto cuando venimos a Inglaterra, ella en EE.UU me permite hacer lo que yo quiera, y eso me gusta. Cuando entro en el baño esta la estilista de siempre, Merry y las maquilladoras, Lina y Janed y por supuesto mi peluquero el único a quien mi madre y yo confiamos nuestro pelo, Chals.

-Hola, querida – me dice Chals a mi entrada.

-Hola, Chals, ¿Cómo estas?- le pregunto por educación.

-Muy bien, ahora, al verte- me dice amablemente, invitándome a sentarme con un gesto.

-Hola, Skitty- Dicen al unísono Lina y Janed. Ellas me llaman Skitty un día se confundieron y así me llaman desde entonces, ella son como uña y carne por eso son tan buena maquillando juntas.

-Hola, Lina, hola, Janed, ¿como estáis?- les dije mirándolas fijamente.

-Muy bien, ahora al poder maquillar tu increíble cutis- dicen otra vez al unísono, según ellas tengo una piel de escandalo y siempre me maquillan de una increíble manera y porque no decirlo me encanta.

-Hola, Merry-digo yo al verla tan ocupada en mi vestimenta, ella es la más seria del grupo, ya que hasta que no termina con la ropa no se le puede decir ni “mu”, ya que si no te fulmina con la mirada.

-Déjala anda esta muy concentrada eligiendo tu ropa para toda la semana- me dice Chals, mientras me echa hacía atrás mi larga melena, hacía más de 3 meses que no iba a la peluquería de Chals, eso a veces le enfadaba y otras le encantaba ya que mi pelo crecía muy rápido y así podía hacerme mas peinados –te voy a cortar el pelo a capas, y te voy a poner flequillo recto.

-vale, pero acordaros que en 10 minutos tengo que estar lista- dije mirando el reloj.

-bueno nosotras vamos a usar una sombra de ojos marrón y la raya negra y los pómulos les pintaremos del color de tu piel y te pintaremos los labios de rojo fuerte ya que tiene una piel blanquita y perfecta, pero eso si ya sabes nos encanta resaltarte los ojos, es que son preciosos- dijo Janed, con una sonrisa de oreja a oreja.

-Yo voy a ponerte unos pitillos morados fuerte y una básica blanca con una chaqueta de ejecutiva como la llamas tú de color negro, liso, y unas converse negras y blancas, ya que sé que te encantan- dijo al fin Merry- y ya iré a tu internado a dejarte la ropa para esta semana.

-vale, pues entonces manos a la obra – dije yo satisfecha.

10 minutos después………

-Señorita, tiene que salir ya, es la hora- dice uno de los mayordomos de mi madre desde afuera.

-ya esta, ya salgo- dije yo abriendo la puerta.

Como siempre los mayordomos, más jóvenes se quedaban boquiabiertos, mis amigos tenían magia, para dejarme de tal manera que los tíos se quedaran boquiabiertos al verme.

Jorge era el más antiguo mayordomo de la familia y era como una hija para el y el como un padre para mi nos queríamos mucho y era mu celoso ante el tema de los chicos. Nunca le a echo ni pizca de gracia.

Yo empecé a caminar y ya empezaba a oír las cámaras sacando fotos, había 7 guardaespaldas esperándome afuera del baño, mi madre siempre los contrataba para que los de la prensa no me agobiaran mucho. Cuando llegue a la sala principal del aeropuerto una nube de flases, me cegaba, así que me puso las gafas de sol que son lo mejor para estos casos.

Ya estaba a la salida del aeropuerto y vi la limusina de mi madre aparcada, con paso firme me decidí a caminar asía la limusina, unos segundos antes de entrar la puerta se abrió y yo me metí.

-Hola, mamá- le dije mientras miraba fijamente sus ojos, escondidos detrás de las oscuras gafas de sol, de Chanel, de mi madre.

-Hola, Cariño, ¿Qué tal?- el coche se puso en marcha, rumbo al internado.

-Bien, no sabes lo que me paso en el avión- Le conté lo que me paso con esa estúpida azafata.

-Muy bien cariño así me gusta, pero ves por qué no me gusta que vayas en aviones públicos, por algo tenemos el jet privado- me dijo algo enfadada.

-ya pero sabes que no me gusta es muy solitario, y da mucho el cante- no me gustaba mostrar a todo el mundo la riqueza de la que yo disponía, me gustaba ser normal, aunque mi fortuna fuera algo descomunal, sé que tenia mucha suerte en esta vida y que no todo el mundo podía tener lo que yo tenia.

-Ya, cariño, pero yo no puedo hacer nada esa es la vida que tienes- me dijo quitándose las gafas de sol.

-Vale, mamá, pero no esta mal de vez en cuando ser algo normal- le dije mirando la ventanilla.

-Bueno pero es que tu no eres normal, eres hija de la realeza y de un empresario que hace millones al año, lo siento cariño así es tu vida, si no fuera por mi te hubieses puesto en clase turista, y eso si que ya no lo permitiría- me miro, como diciendo “tu clase turista, ja, antes me mato”.

-Vale, mamá- suspire, mire el paisaje era todo verde era, precioso ya suponía que el internado estaría a las afueras de Londres, ya que sus dimensiones son descomunales.

-Es precioso, ¿no?- me dijo en tono nostálgico.

-Si, es algo increíble…….. ¿Hasta que edad tendré que estar hay?

-Es hasta los 18, hay bachillerato, así que te quedas hay hasta la universidad- me dijo clavándome sus ojos verdes llamativos- a y mañana tenemos que ir a visitar a la abuela.

-¿A palacio?- pregunte exaltada.

-Claro, ¿Adonde si, no?

-joooo, ma, que venga ella, sabes que no me gusta ir a palacio, siempre esta lleno de periodistas y lo odio- dije yo ya haciendo pucheritos, aunque sabia que en este tema no iba a servir de nada.

-Oye, sabes muy bien que si la abuela sale del palacio la mataran a fotos, es mejor que vayamos nosotras al menos en palacio estaremos protegidas de periodistas- solté un suspiro de resignación.

-Vale, pero me voy a devorar sus helados, los que hace su mayordomo Eric son los mejores del mundo- solté una pequeña risilla.

-vale, a mi me parece bien y yo que te pensaba dar dinero para convencerte, no pensaba que fuera tan fácil y solo por un helado- soltó una risa triunfante.

-eeeeeeee, no, eso no vale, bueno pues ahora me pico-hice un puchero.

-bueno, si te portas bien, te lo doy luego.

-gracias, mami- dije como una niña pequeña.

Mi madre me miro de arriba abajo y se paró en mis zapatos, ya sabia lo que iba a decir.

-Como Merry, te deja ponerte esos zapatos- me dijo enfadada, en temas de moda es capaz de matar y no veas lo que sufre en EE.UU al verme vestida de aquella manera, siempre intenta traerme a Inglaterra para vestirme mejor, ya que tenemos un trato ella y yo.

-Ma, Merry sabe que no soporto los tacones y ella me dijo que hasta mas tarde me lo pasaba, pero que tengo unos tacones aquí en el coche, que me tengo que poner antes de entrar al internado, y me dejado una ropa de recambio dentro del coche- le dije ya buscando mi ropa.

-Vale pues entonces vete ya poniéndotela por que en 5 minutos estamos delante del internado.

-Vale- dije ya sacando mi ropa de la bolsa.

-Ah, y una cosa más, mande a Merry a comprarte ropa para tu estancia aquí en Inglaterra tienes 5 maletas esperándote en tu habitación- me dijo con una sonrisa ganadora- son todas de nuevas colecciones y si quieres algo más aquí tienes una tarjeta de crédito, y como compres chándales te mato- me echo una mirada de hielo.

-Y que as hecho con mis maletas- pregunte fulminándola con la mirada.

-Las mande guardar en el jet hasta que yo me vaya a los Ángeles, hay lo mandare guardar en tu habitación o tirarlas, depende de como vayan tus notas, ¿trato?- pregunto victoriosa, me tenia entre las cuerdas, que iba a hacer más que aceptar.

-Esta bien, pero que sepas que has jugado sucio- le dije enfurruñada.

-Yo no he jugado sucio, tenia ventaja y la he aprovechado- sonrió levemente.

Suspire resignada, y me concentre en ponerme la ropa, Merry me dejo unas botas cortas grises, unos shorts blancos, una camiseta de manga corta gris, y un chaleco corto y sin mangas blanco.

Llegamos ya al internado, y como suponía el internado era de grandes dimensiones, la puerta ya era algo descomunal.

La cara oculta de la Luna: Sinopsis.

Sinopsis:

-Estoy mirando al techo de mi habitación, apenas a unas horas, de coger un avión e irme a un internado en Inglaterra, pensando como era mi infancia, con apenas coger un sábana y atármela al cuello, ya era una superhèroina, con solo mirar una nube podía sacar mas de 100 formas diferentes, y siempre miraba el lado bueno de las cosas. Ahora ya no puedo ver nada de eso, ¿Imaginar, soñar, divertirse?, Esas ya no son palabras que hay en mi diccionario de adolescente, son tonterías, para ellos solo hay una cosa "estar guapos". Perfumes, ropa, complementos, maquillaje...etc. Eso es todo lo que hay en su mundo son todos unos superficiales. Pero yo, yo no encajo en su mundo, solo soy una niña atrapada en el cuerpo de una adolescente, esa niña no quiere crecer, tiene miedo, la gente le hace daño. Digamos que soy una adolescente problemática, buscando su lugar en el mundo. Nunca destaco, así soy yo Sky Nanamy, y tengo 16 años.

Soy Sky Nanamy, ¿En una palabra?, No existe palabra para describir una chica como yo, bueno si una “Especial" o al menos así es como me describe la gente. Tal vez esas personas no han disparado un arma, pero a mi, a mi me han matado. Siempre tratándome de manera especial, pero luego por las espaldas me traicionaban, nunca he podido encontrar un amigo de verdad, ya que los que venían donde mi era solo por interés, “un móvil, Fotos con la prensa, Invitar a esto a o lo otro”, siempre había una razón, pero esa razón nunca fue de una amistad verdadera. Pero como mi madre dice "nunca muestres tu debilidad, ante el enemigo". Siempre me han mimado mucho, pero no crecí como esas típicas mimadas Barbies, mi familia es de dinero ya que mi madre pertenece a la realeza en Inglaterra y mi padre tiene antepasados de la realeza japoneses por eso mi apellido "Nanamy", aunque también tiene una empresa muy importante en todo el mundo "O`tton New Tecnology", es una empresa que crea nuevas tecnologías y dentro de poco van a sacar al mercado el nuevo móvil "Sky Fin's 6" el teléfono que cualquier adolescente quería tener, ya que es el mejor del mercado, pero yo, ya lo tengo. Mis padres son divorciados, en la alta sociedad eso esta mal visto, ¿Pero que le van a decir a la realeza, como mi madre, o a un empresario tan importante, como mi padre?, nada, a ellos tal vez nada, pero a mi de todo.

Me encanta el deporte, artes marciales, surf,... todo lo que pueda encontrar, no soy como las de mi clase que con correr 30 segundos ya parecen ancianas apunto de partirse en dos. Tengo también una afición secreta me encanta la música, pero nadie, absolutamente nadie, lo sabe, se me da bastante bien cantar, creo canciones, que bueno, las guardo en mi cojín de las canciones, siempre lo tengo conmigo. Soy algo introvertida, pero tampoco dejo que me pisoteen, ya que mi madre se enfadaría, por haberlos dejado (jajá), mi físico es algo raro ya que mi color de ojos es azul, gris, miel, castaño, no se de color es mis ojos, a veces de pende de mi estado de animo, dicen que los ojos son el reflejo del alma y el color de mis ojos muestra lo confusa que es mi alma, al parecer. Tengo el pelo largo y negro, lacio, hasta una geisha tendría envidia de mi pelo, siempre lo llevo suelto no me gusta recogerme el pelo ya que es lo único bonito que tengo, mis dientes desde pequeña fueron cuidados por mis padres con sumo cuidado, ya que cada dos por tres estábamos en el dentista, un cuerpo bien moldeado, no soy gorda, pero tampoco escuálida, me gusta llevar 4 tallas más de ropa, pantalones anchos, camisetas largas y anchas, y que nunca falte, mis zapatillas deportivas blancas, mi color de pieles blanco, pero en los Ángeles a cogido algo de color , y mediré más o menos 1'76. Bueno creo que ya no hay más que explicar de mi físico, esa soy yo, la chica de quien todos mis compañeros se ríen, y creo que ahora que voy a ir a mi nuevo instituto, serán nuevas burlas, pero me da igual siempre que cierre los ojos, tendré a mi madre conmigo.

 Solo falta 3horas para coger el vuelo a Inglaterra, y sigo mirando el techo de mi habitación, el tiempo pasa, cada vez falta menos, cierro los ojos y me duermo hasta que sea la hora de ir al aeropuerto……